viernes, 16 de enero de 2009

Temores

Temo sin temer, me alegro sin estar feliz
pasan los días como si no valieran nada,
mi existir se apaga con cada segundo que transcurre,
como el ultimo pedazo de mecha en la vela casi terminada.

Pienso en aquellos dias, cuando todo era un juego y nada era serio,
cuando las tardes se convertían en noches y no había más.
la vida era sencilla, sin desvaríos, sin sobresaltos,
en cambio, ahora ya no tienen sentido.

No importa si es de noche, o si es de día,
no importa si me quedo o me voy,
si pienso o sólo contemplo,
si lloro o río.

La vida se me escapa ante mis ojos,
y no puedo hacer nada para remediarlo,
me ahoga tanto el existir, que no sé qué es lo mejor,
¿morir?, ¿vivir?, ¿llorar?, ¿reír?, ¿seguir?

Las cosas pierden sentido, ¡ya no soy, quién solía ser!
pero no hay más, no hay más...
sólo el balbucear de mis pensamientos,
sólo la certeza de la soledad.

Soledad, compañera incómoda, pero a veces necesaria,
compañera no deseada, pero a veces anhelada,
compañera que trae tristeza, pero a veces alegrías,
compañera inevitable... pero compañera al fin.

Hoy, ya no quiero estar sólo, pero la soledad no me abandona,
se aferra a mi cuerpo, a mi alma, a mi espíritu.
Y aunque quisiera no tenerla... sé que está aquí,
sé que no me abandona, aún cuando no quiero que esté aquí

Ahora temo sin temer y me alegro sin ser feliz,
pues sé en el fondo que no estoy... sólo.

No hay comentarios:

pensamientos

pensamientos